La humildad no consiste en negar tus fortalezas; se trata de ser honesto acerca de tus debilidades.
1.
Oh hombre, él te ha declarado qué sea lo bueno, y qué pida de ti Jehová: solamente hacer juicio, y amar misericordia, y humillarte para andar con tu Dios.
2.
Y lo vil del mundo y lo menos preciado escogió Dios, y lo que no es, para deshacer lo que es:
3.
Para que ninguna carne se jacte en su presencia.